Un encuentro de la comunidad LGBTI terminó en una denuncia por graves amenaza. El hombre entró a los gritos y"Dijo que había comprado cinco bidones de nafta para prendernos fuego a todas”, relataron las mujeres. El agresor se habìa quejado por ruidos molestos, pero los vecinos al enterarse de lo sucedido les dieron su apoyo porque afirmaron que "Nunca tuvieron problemas con las actividades del local".
En el lugar, al momento de su irrupción, eran siete mujeres que trabajaban en las Mesas Les para avanzar en un proyecto a partir de la firma de un convenio con el Fondo de Mujeres del Sur para armar un observatorio y estudiar la violencia hacia y entre lesbianas.
