Gabriel Gareca Lizarraga fue arrojado, con graves lesiones, en la cabeza la semana pasada a la altura del kilómetro 45 de la ruta nacional 50.
Personal policial de la Sub Comisaria de Aguas Blancas fueron advertidos por la presencia de un cuerpo sobre la ruta 50. De inmediato se llegaron al lugar donde ya se encontraba personal de Gendarmería Nacional, que habían sido alertados por un automovilista, sobre la presencia de un hombre que al parecer estaba muerto en la baquiana.
Se trataba de un joven de 31 años oriundo de Bermejo, que se encontraba tendido al costado de la cinta asfáltica sentido sur a norte. Lo llamativo del hecho es que en el lugar no se observó vehículo ni personas algunas.
Al lugar arribo la ambulancia de la localidad de Aguas Blancas, que trasladó al joven a la guardia del hospital San Vicente de Paul. Por su estado criticó fue derivado a terapia intensiva y conectado a respirador artificial.
El estado de salud del boliviano empeoro, y cerca del mediodía se confirmó su deceso, el diagnostico del fallecimiento fue; “traumatismo encéfalo craneal grave, fractura con hundimiento parietal derecho”. La causa quedó caratulada como tentativa de homicidio.