Luego de que el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales se mostrara satisfecho por el cierre del ingenio San Isidro, aduciendo que esta situación beneficiaría a los jujeños, quien salió al cruce con duras declaraciones fue el intendente de Campo Santo, Mario Cuenca.
“Uno no se puede alegrar de la desgracia ajena, si fuese jujeño me daría vergüenza que mi gobernador sea Gerardo Morales. Esperamos que el Gobierno de la provincia se pueda expresar sobre este tema”, comentó Cuenca en diálogo con FM Capital.
Además, el presidente del Foro de Intendentes manifestó que "Tenemos la esperanza de que el Ingenio vuelva a funcionar, están muy cerca de cerrarse las negociaciones para la compra y esperamos que así sea".