Con el puente internacional cerrado desde el año pasado, los responsables de gomones que cruzan el río Bermejo entre la ciudad homónima y Aguas Blancas presentaron ayer una nueva alternativa para cruzar: un puente que tenía como base esas más que precarias embarcaciones.
La imagen retrotraía la retina al lejano Oriente, donde con barcas hechas de juncos, se facilita el tránsito entre una orilla y otra de algún río.
Aproximadamente tres metros de ancho tenía esta pasarela improvisada, que cruzaba el río desde la playa de Aguas Blancas, hasta la playa de Bermejo, en el vecino país.
En las imágenes que se viralizaron ayer por las redes sociales se pudo observar cómo colocaron los gomones que, aprovechando el bajo caudal de agua en esta época del año, permitió cruzar la frontera de forma peatonal, cobrando entre $50 y $100 por persona, de acuerdo a la cara del cliente, o la cantidad de bultos que transporte, por unas horas.
Ya en horas de la tarde, a eso de las 16, llegaron fuerzas de Gendarmería Nacional y boliviana y obligaron a los boteros a desarmar la improvisada estructura.
Fuente: El Tribuno
