La compañía de San Diego presentó una demanda en la Comisión de Comercio Internacional de los Estados Unidos, solicitando que se detenga la importación de iPhones y otros productos.
En pocas palabras, el desarrollador de procesadores busca impedir que el gigante de Cupertino siga vendiendo iPhones que incorporen tecnología desarrollada por ellos, sin permiso. A su vez, se busca una indemnización por los daños económicos ocasionados a raíz de esto.
Qualcomm asegura que se utilizaron de manera ilegal seis patentes que "permiten un rendimiento superior en el smartphone y alargan la vida útil de la batería".
No se detalla cuáles son los modelos a los que se hace referencia y en principio esta solicitud de prohibición de venta y distribución no tendrán un efecto en el corto plazo.
La demanda se presentó el jueves, las investigaciones comenzarán en agosto y se estima que las resoluciones recién llegarán el año próximo.