El pasado martes la policía de Barcelona detuvo al sujeto que se lo apodó como "gigoló" de Tinder. Albert Cavallé usaba la red social de citas para estafar a sus víctimas.
El acusado se presentaba como un millonario con cuentas en Panamá, y mediante la seducción invitaba a sus citas a un hotel. Mientras las mujeres dormían les sacaba fotos a las tarjetas de crédito y usaba esa información para salir de comparas.
Además de robarle la tarjeta a sus conquistas, Cavallé mantenía una relación afectiva con algunas de ellas para pedir importantes sumas de dinero cada tanto, y hasta hubo casos de 40 mil o 60 mil euros por "una emergencia".
Además compraba electrodomésticos y celulares que después revendía en la web. Luego usaba el dinero para pagar autos, hoteles de lujo y cocaína, informó un medio local de España.
La primera denuncia contra él fue radicada en Cataluña en 2013 pero algunas de las víctimas aseguraron que fueron amenazadas tras hablar, así que no hay un número fijo de afectadas.
Fuente: El País
