Esta medida se aplicará de manera efectiva en todo el país, a excepción de las provincias de Mendoza, Córdoba, Capital Federal y Santa Fe, que tienen legislación propia al respecto.
La resolución establece que “los menores de diez años deben viajar sujetos al asiento trasero, con el Sistema de Retención Infantil homologado al efecto, en relación a su peso y tamaño”.
Si bien se considera una buena iniciativa en general, se ha cuestionado la cuestión del peso y la talla ya que, en un eventual accidente, la medida de seguridad puede ser contraproducentes si la contextura física del menor excede los parámetros de contención que ofrece la "sillita".