Hace un año aproximadamente que el convento ubicado en General Rodríguez se hacía famoso pero no por cuestiones religiosas, sino porque se detuvo a José López, ex secretario de obras públicas de la Nación, quién arrojó bolsos por el aire con casi 9 millones de dólares.
Ahora, por decisión del arzobispado de Mercedes-Luján en conjunto con el Vaticano, decidieron clausurar el lugar.
De acuerdo a fuentes de la curia, el monasterio se desactiva no porque se haya encontrado complicidad de las monjas con el delito, sino por falta de miembros e incumplimiento de requisitos estatutarios de la comunidad.
En lo inmediato las religiosas que aún viven en el convento no serán trasladadas, pero se estima que sean reubicadas en alguna obra eclesiástica.