El presidente Daniel Ortega mostró su increíble violencia una vez más la tarde de ayer en Nicaragua, tras ordenar el ataque a una gran manifestación realizada por las madres de las víctimas de la represión de abril en este país.
Seguidores del Frente Sandinista, grupos parapoliciales y oficiales antidisturbios dispararon contra los manifestantes, que marchaban desarmados por la Carretera a Masaya de Managua.
El ataque ha dejado decenas de heridos y al menos 11 muertos, entre ellos, una joven de 15 años según el recuento del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH).
Fuente: El País