El Centro Médico de la Universidad de Ámsterdad ha suspendido un ensayo clínico tras la muerte de 19 bebés cuyas madres fueron tratadas con el medicamento sildenafil, comúnmente conocido como viagra, durante el embarazo, según anunció el pasado lunes la institución a través de un comunicado. De ellos, 11 murieron a causa de un aumento de la presión arterial en los pulmones provocado por el tratamiento.
El estudio, que arrancó en 2015, pretendía evaluar la seguridad y efectividad del medicamento en no natos con una limitación grave de crecimiento durante las primeras fases del embarazo. La esperanza de los investigadores holandeses era que el fármaco consiguiera abrir algunos vasos sangíneos en la placenta, estimulando así el desarrollo del feto, pero los efectos adversos después del parto han obligado a "suspender inmediatamente" las pruebas.
Los bebés de estas características apenas llegan a pesar 300 gramos después de 22 semanas de gestación y su esperanza de vida no supera el 50% en la mayoría de los casos. Cuando consiguen llegar vivos al parto, su salud es delicada. Hasta ahora no se conocía ninguna terapia que ayudara a su crecimiento, si bien estudios previos realizados en Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda no encontraron que la intervención con viagra fuera dañina.
Fuente: www.elconfidencial.com
