Rune Fiska, es de Oslo, Noruega y tiene 22 años de edad, en su afán de depilar su pecho, y terminar con el vello indeseado, se roció un poco de perfume en su pecho, y luego no tuvo mejor idea que usar fuego. ¿Y qué paso?
En el video de solamente 11 segundos se muestra a Rune, intentando desesperadamente palmear su piel y después decide tirase agua con el duchador de mano.
“Hicimos lo mismo una semana antes, pero solo se quemó la mitad del vello, sin llegar a la piel, así que decidimos volver a intentarlo. Quería filmarlo porque fue muy divertido la primera vez. No esperábamos que las llamas fueran tan grandes”, comentó el amigo que grabó la escena.
“Pero cuando el fuego abrasó a Rune, nos dimos cuenta de que no era una idea tan graciosa y que encerar su pecho hubiera sido más seguro y probablemente menos doloroso”.
A pesar de mojar su cuerpo en los momentos posteriores a la fantástica idea, Rune sufrió quemaduras de segundo grado y ahora tiene una cicatriz de más de 15 centímetros en el pecho.
Fuente: Noticias Insólitas