El caso se conoció en las últimas horas y causó conmoción en Rusia: la Policía detuvo a una pareja sospechosa de haberse comido a entre 7 y 30 personas. Los supuestos caníbales tenían restos humanos guardados en la heladera de su casa en Krasnodar, en el sur de Rusia.
Las fuerzas de seguridad lograron identificar a siete víctimas, pero se cree que podrían ser hasta 30 las personas que fueron asesinadas y luego comidas por la pareja.
La pareja admitió que las partes humanas que hallaron en la heladera de su departamento estaban destinadas a su consumo. Operaba en la región desde 1999 y pudo haber cometido múltiples asesinatos.
Según la prensa rusa, además de alimentarse con carne humana, los presuntos caníbales preparaban conservas con los restos de sus víctimas.