Ricardo Centurión le hizo oídos sordos a los hinchas de River que le cantaron a modo de burla "pisala ahora, la p... que te parió" cuando Eduardo Coudet lo mandó a la cancha en lugar de Renzo Saravia. Aunque en Núñez siga fresca aquella expulsión que incluyó la franja de Boca en el Monumental, por la Libertadores, el cruce del Wachiturro se dio con su entrenador.
Centurión fue el tercer cambio de la Academia. Al ver que lo estaban llamando, Centu puso cara de pocos amigos. Se mordió el labio inferior, agachó la cabeza y se dirigió hacia los asientos del banco. Allí arrojó la pechera de mala forma y desoyó al entrenador. Coudet se le acercó para darle indicaciones y Centurión lo empujó con el brazo izquierdo, como para ponerle distancia, y se produjo un cruce de palabras.
"No hablo de casos individuales", dijo el Chacho al ser consultado sobre el entredicho.
Al futbolista, parece, le molestó que lo pusieran cuando faltaban 23 minutos porque, seguramente, creyó que el Chacho lo tendría que haber puesto antes. Fue tan áspero el cruce, que en un momento se vio a Sigali acercarse y muchos creyeron que iba para el sector porque iba a ser reemplazado y en realidad, trataba de separarlos...
