Los Infernales volvieron a ganar en condición de locales, en un partido de bajo goleo, poca eficiencia y mucha adrenalina.
Los salteños mostraron más oficio que los visitantes y, en un cierre de juego que tuvo en vilo a todo el estadio, se llevaron el partido por 59 a 57, con una alley oop de Diego Gerbaudo para Quinnel Brown para el estallido a puro festejo.
El próximo partido será el viernes en Córdoba ante Atenas a partir de las 21.30.