La relación entre Neymar y el PSG cambia día a día. Cuando parece que el brasileño por fin de se adaptó al conjunto parisino, a la ciudad, y se siente cómodo en su equipo, un nuevo conflicto vuelve a generar el descontento de los hinchas y del deseo de brasileño de dejar definitivamente París.
En el mercado de verano del 2019, Ney empezó a coquetear con la posibilida de irse y el Barcelona fue a la carga por él. Pero después de muchas idas y vueltas, y de exuberantes ofertas, el PSG le puso un precio que el Culé no estaba dispuesto a pagar (pretendía recuperar los 222 millones de euros que había pagado por su pase) y, contra su voluntad, no le quedó otra que permanecer en el conjunto parisino. Sin embargo, en este mercado, en el caso de que Neymar quiera marcharse, tiene otra alternativa reglamentaria para forzar su salida....
¿De que se trata? Desde que llegó al conjunto parisino, el brasileño nunca renovó su contrato y no tiene cláusula de rescisión, por lo que, de acuerdo al Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores de la FIFA, está amparado para fijar un precio de salida. Esto será posible recién cuando Ney cumpla tres temporadas o tres años (lo que ocurra primero) en el PSG, cosa que pasará en agosto del 2020.
En el próximo verano europeo, Neymar cumplirá con lo que la FIFA denomina "periodo protegido" y, pasado ese tiempo, el reglamento le reconoce el derecho a abandonar el club pagando una indemnización. Para calcular el valor de dicha suma, la máxima entidad del fútbol utiliza una fórmula que tiene en cuenta el valor de la compra del futbolista y la amortización de su ficha, y otras variables. Actualmente, la cifra estimada ronda los 180 millones de euros. Eso es lo que debería pagar el Barcelona, o cualquier otro club, si quiere llevárselo.
