La Selección argentina entrenó a la vista del público ruso.Si bien existió una práctica intensa pero informal, fue la excusa perfecta para cumplir la obligación de la FIFA y abrir las tribunas para que, entrada mediante, los niños de la pequeña Bronnitsy vean de cerca a los mejores futbolistas del mundo.
Con camisetas del Barcelona o de Argentina, Lionel Messi fue el centro de atención durante la hora y media que salió a una de las canchas del búnker de la Argentina.
Fuente: Perfil